10 diciembre, 2019

Juró Pablo Javkin como intendente municipal

En un colmado recinto de sesiones del Concejo Municipal, la presidenta del cuerpo, María Eugenia Schmuck, tomó el correspondiente juramento.

Puntualmente a las 18, Javkin llegó al Palacio Vasallo, donde lo esperaron en el salón “Puerto Argentino” la titular, del Concejo, María Eugenia Schmuck; el vicepresidente primero, Roy López Molina, y la vicepresidenta segunda, Marina Magnani, quienes estuvieron acompañados por la secretaria general Parlamentaria, Agustina Bouza, y el secretario general Administrativo, Mariano Roca.
Tras una breve reunión con ediles de los diferentes bloques en el despacho de la presidencia, y ya en el recinto de sesiones abrió la ceremonia la presidenta del Concejo, Schmuck, quien invitó a ingresar al palco de honor “Manuel Belgrano” a Javkin, donde ya lo esperaban su padre, Eduardo, su esposa, Cecilia; sus hijos Sebastián y Camila, y la hija de la edila Schmuck, Emma.
La secretaria general Parlamentaria, Agustina Bouza, leyó la resolución por la que se convocó a la sesión especial; se entonó seguidamente el Himno Nacional y habló luego la titular del cuerpo.

De Schmuck

Al iniciar sus palabras sostuvo la concejala Schmuck que: “La vida nos pone excepcionalmente frente a situaciones extraordinarias, y créanme que ésta lo es para mí y estimo también para muchas y muchos de ustedes. Tomar juramento en mi carácter de presidenta del Concejo Municipal al intendente de esta ciudad en ésta, la casa de todas y todos los rosarinos, constituye un enorme privilegio. Pero créanme que hacerlo para consagrar el sueño colectivo de una generación, para que asuma esta honorable responsabilidad un amigo, compañero y referente de tantos años, tiene una carga adicional difícil de asumir sin conmoverse profundamente”.
Acotó luego la titular del cuerpo que “por eso pido que me permitan en estas breves palabras y en este acto institucional tan relevante para la vida de la ciudad, dirigirme al señor intendente municipal, pero también a Pablo”.
“Tenemos por delante señor intendente -prosiguió Schmuck- el desafío de trabajar mucho por la ciudad de hoy y la del futuro, por ésta Rosario que nos vio nacer. Por muchas vecinas y vecinos que la están pasando mal. Por nuestras infancias, que deben ser el objetivo prioritario. Para unir la ciudad, como usted indica, porque los desafíos son tan importantes que sólo se superan si trabajamos juntas y juntos”.


Más adelante precisó: “Para ello hay que construir con todos y todas, sin distinciones, reconociéndonos en la diferencia y priorizando lo importante. El país y Rosario atraviesan tiempos difíciles que nos preocupan, nos interpelan y deben movilizarnos. Y no tenemos derecho a fallarle a una sociedad que espera mucho más de cada una y uno de nosotros.Aspiro que desde este lugar, las concejalas y los concejales podamos hacer nuestro aporte”.

Luego expresó Schmuck: “Que avancemos con una agenda moderna y creativa, que a partir del consenso pueda dar respuesta a debates largamente postergados en este recinto y aporte soluciones innovadoras a problemas estructurales y otros nuevos que las requieren. Poniendo siempre en el centro de todas nuestras decisiones a la gente, sus necesidades y preocupaciones. Con un hacer genuino, comprometido, sensible y decente. Corriéndonos de los lugares comunes de la política para que la política vuelve a ser el lugar que nos encuentre para transformarle la vida a nuestra sociedad y dignificarla garantizando los derechos que la asisten.

“Tendrá entonces usted, señor intendente, -prosiguió-en éste Concejo, un espacio con vocación de colaborar decididamente, con voluntad de construcción colectiva, y para controlar los actos de su gobierno. Sé que usted quiere eso, nosotras y nosotros también. Asumiendo cada cual el rol que la ciudad nos asignó, pero con el horizonte puesto en la necesidad de hacer posible la ciudad del respeto, la solidaridad y la igualdad que soñamos”.

En otro tramo de sus palabras la presidenta del Concejo marcó: “No puedo terminar estas palabras, sin hablarte a vos, Pablo. Transmitirte en nombre de muchas y muchos, la emoción y el orgullo que nos abrazan en este momento. La confianza que nos genera saber que conocés esta ciudad en cada uno de sus rincones, que la amás tanto como a tu propia vida, que seguís haciendo y caminándola hoy con exactamente la misma rigurosidad, sensibilidad y honestidad que en aquellos viejos días de juventud.

“Decirte que cuando cerramos los ojos -sostuvo-, parece todo un sueño imposible. Y entonces es inevitable recuperar imágenes de aquellos apasionados e interminables debates sobre la ciudad y el país, cantando abrazados en alguna peña o en alguno de los tantos actos del viejo, Raúl Alfonsín, conmoviendo e interpelándonos en alguno de tus discursos, convocándonos siempre a soñar mundos mejores”.

Conmovió luego a Javkin al evocar a su madre, Mirta Guelman. “Inevitable también recordar a Mirta, mujer y maestra extraordinaria y que todos los días, en tus gestos, opiniones y decisiones, se hace mágicamente presente».

Señaló que “hace un poco más de 25 años, en uno de los tantos encuentros para debatir la ciudad y sus desafíos, de las cosas que le faltaban y nuestras ganas de transformarlo todo, me dijiste con ojos llenos de esperanza…ojalá tengamos alguna vez la posibilidad de hacerlo. Ese día llegó Pablo”

En los tramos finales afirmó la presidenta del Concejo: “Hace un poco menos, un 9 de diciembre de 2005, la vida te puso frente a la prueba más difícil y hoy, 14 años después, te regala este reconocimiento del que sólo son tributarios quienes saben que el camino es largo, que lo importante no es llegar sino el camino que se elige para recorrerlo y que la clave es la consecuencia con nuestras convicciones, persistir y no bajar los brazos.

“Sé que estarás a la altura de las circunstancias. Muchas suerte, señor intendente, muchísima suerte, Pablo. La ciudad de Rosario te espera y necesita”, finalizó Schmuck.

Jura y palabras de Javkin

Tras invitar a acompañarla en el estrado a los vicepresidentes López Molina y Magnani, la presidenta del Concejo tomó el juramento a Pablo Javkin, quien juró “por la Constitución Nacional y la vigencia del sistema democrático”, mientras desde la barra prorrumpían en el “ole, ole, Pablo”.

En su mensaje dijo Javkin que “es un verdadero honor estar acá”, para recordar que “es una casa que he recorrido desde chico”; marcó que “hoy 10 de diciembre es el Día de los Derechos Humanos” y evocó a las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo.
Más adelante mencionó que había estado por primera vez en el Concejo cuando peleaban por el medio boleto universitario y luego recordó que “en un momento difícil para el país” había jurado por vez primera como concejal, el 10 de diciembre del 2001”.
Aludió en otro tramo a la solidaridad para hacer referencia a un momento difícil de su vida -en el 2005 ocasión en la que sufrió un grave accidente automovilístico en el sur del país-, cuando lo iban a visitar “clandestinamente” a la sala de terapia intensiva, amigos de la política, “no por espíritu corporativo, sino porque se construye en conjunto”.

Anticipó que el discurso formal será en marzo próximo cuando inaugure el período de sesiones 2020, pero insistió en el trabajo conjunto y se refirió a una palabra que “hoy utilizó en su discurso el presidente de la Nación, Alberto Fernández, fraternidad, para reivindicar “un tiempo fraterno y solidario.”.
Destacó la presencia de su gabinete y aseveró que “el futuro tiene que ver con la conquista de derechos”.
Reivindicó la necesidad de “encontrar soluciones, antes que conflictos” y sostuvo que pretendía un diálogo directo de los integrantes de su gabinete con los ediles.
También afirmó que “yo no vengo a refundar nada” y anticipó la necesidad de tratar rápidamente algunos temas.

Asistentes 

Entre otros asistieron al acto el rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Franco Bartolacci; los integrantes del gabinete que acompañará en su gestión a Javkin; el diputado provincial Ariel Bermúdez, de Creo; el decano de la Facultad de Derecho de la UNR, Hernán Botta, y los ex ediles Carlos Comi, Jorge Boasso y Juan Monteverde.