13 junio, 2018

Acuerdos sobre el proyecto de la Ciudad Universitaria

Ediles de las comisiones de Planeamiento y Gobierno avanzaron en  un borrador para consensuar la propuesta oficial e integrar usos académicos y de vivienda familiar.

Presidida por María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular, la reunión conjunta se realizó este miércoles 13 de junio en el Anexo I «Arturo Illia».

Contó con la asistencia de Horacio Ghirardi, del bloque Socialista; Agustina Bouza y Carlos Cardozo, de Cambiemos; Eduardo Toniolli, del Partido Justicialista; María Eugenia Schmuck, de la bancada Radical, y Celeste Lepratti, del Frente Social y Popular.  Estuvieron presentes, en representación de la Municipalidad, el presidente del Servicio Público de la Vivienda y el Hábitat, Manuel Sciutto, y por la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Claudia Rosestein.

Desde hace varias semanas, ediles de las comisiones de Planeamiento y Gobierno vienen reuniéndose para analizar la transformación urbana de la Ciudad Universitaria de Rosario (CUR) y su entorno.  El proyecto integral comprende la construcción de más de 250 viviendas en el barrio República de la Sexta, el trazado de una nueva avenida sobre calle Berutti que cambiará su nombre, la recuperación de los terrenos de la UNR, y la relocalización de familias.

En principio, Gigliani puso en consideración el borrador que modifica el proyecto original, con aportes y puntos de vistas que fueron consensuados con los distintos bloques, en el marco de una reunión de trabajo  de la comisión de Planeamiento, efectuada  el martes 12 de junio en el despacho de la edila de IP. El financiamiento, tanto de las obras de infraestructura como de las viviendas, estará a cargo del Estado provincial.

“Resulta complejo modificar a nivel estructural una ordenanza elaborada desde el Departamento Ejecutivo. Por eso, hemos analizado artículo por artículo según los acuerdos alcanzados y ponemos a consideración el texto para su revisión y redacción final”, expresó la presidenta de Planeamiento.

Dentro de los puntos  en los que se pudo avanzar se cita a la conformación de una comisión de seguimiento con la participación de integrantes del cuerpo, y la convocatoria a una mesa de gestión social que incluirá a las organizaciones civiles. A través de la firma de convenios se prevé garantizar usos compartidos de las áreas recreativas que se dispongan en el sector y promover la expropiación de espacios públicos afectados. Además, que el Departamento Ejecutivo coordine con la Nación para favorecer el fortalecimiento institucional y dar continuidad del Plan Abre que llevan adelante el municipio y la provincia.

A medida que se avanzó en la lectura de los articulados los concejales fueron planteando distintas opiniones. Sobre el tema de las expropiaciones, Cardozo expresó que “el Concejo sólo puede declarar de interés el área a expropiar, ya que la decisión de la operación le corresponde a la provincia”, en tanto citó las demoras ocurridas sobre el terreno de calle Salta 2141.

Sciutto, por su parte, se comprometió a analizar la redacción de todos los artículos y propuso que la denominación final de la intervención sea «Proyecto de Transformación Urbana, Ciudad Universitaria y República de la Sexta», atendiendo a la identidad histórica y social.

También se avanzó en la necesidad de gestionar la regularización dominial de las viviendas familiares consolidadas y ubicadas sobre Berutti hacia el oeste, un área que a partir de 1958, y en diferentes etapas, sufrió expropiaciones de terrenos.

También estuvo presente el ex concejal Alberto Cortés, quien propuso que ante la existencia de diferencias entre el relevamiento de cantidad y composición de familias y las viviendas a construir, sean analizadas entre las organizaciones y funcionarios del Servicio Público de la Vivienda y el Hábitat (SPV y H), sugerencia que se acordó como viable.

Sciutto consideró que “si bien pueden existir fluctuación y algunas diferencias en la composición de familias que se podrán tener en cuenta, el relevamiento se hizo hace cinco meses de manera correcta en términos generales. Además, existen fotografías aéreas que lo confirman”. Por esa razón, consideró que el proyecto debe incluir “a las familias que vivían” hasta el momento del relevamiento y no incorporaciones posteriores.

También obtuvo consenso que la delimitación que finalmente tendrán los terrenos deberá garantizar la Integración visual  y arquitectónica.