Los ediles analizaron proyecto para modificar normativa respecto al control de armerías.

Presidió la reunión realizada esta tarde, lunes 19 de octubre, a través del sistema Zoom, el titular de la comisión de Control, Convivencia y Seguridad Ciudadana, Roy López Molina, de Cambiemos, y participaron María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular; Susana Rueda, de Rosario Progresista; Ariel Cozzoni, de Unite-Un Gol para Rosario, y Carlos Cardozo, de Juntos por el Cambio.

En el primer tramo del encuentro asistió la concejala Alejandra Gómez Sáenz, del Frente de Todos-PJ, quien explicó su proyecto para modificar la normativa que regula el control de armerías con el objetivo de “poder realizar el control en tiempo real”.

En el proyecto se propicia modificar el artículo 4º de la ordenanza Nº 8.761 por la que el Departamento Ejecutivo deberá instrumentar un sistema informático de utilización obligatoria donde deberán incluirse datos personales del vendedor o comprador de armas o municiones; destino de tales elementos, y entre otros aspectos, el saldo inicial y actual en los comercios del rubro.

La edila Gómez Sáenz marcó la necesidad del trabajo conjunto “de los tres niveles del Estado” en la temática e insistió ante una consulta de la concejala Rueda que “la modificación es la digitalización de la información y la posibilidad de acceder en forma remota” a los datos.

Sugirió posteriormente el edil López Molina tratar “para sacar en conjunto y no emparchar” la ordenanza Nº 8.761, un proyecto de la edila Gigliani que propicia la venta en armerías de “todo tipo de réplicas o imitaciones de armas, cuando su funcionamiento sea producido por un mecanismo automático o semiautomático accionado a gas comprimido, cuyos proyectiles sean potencialmente dañinos; ballestas, cuando cuenten con empuñadura tipo pistola con arco de metal y mira ajustable, acompañadas por dardos con puntas de metal y/o similar; dispositivos portátiles, no portátiles y fijos destinados al lanzamiento de arpones, guías y las municiones correspondientes y armas portátiles de avancarga”.

Recordó la concejala Gigliani que la iniciativa había surgido “cuando se vendía gas pimienta en cualquier comercio, que fue lo único que se aprobó”, para marcar el contexto de la norma propuesta, porque “con la situación en Rosario parece fuera de contexto”.

El edil Cardozo planteó la necesidad de consultar a entidades deportivas que puedan utilizar tales armas, y la edila Gigliani acotó que algunos de dichos elementos, como “las de aire comprimido se venden en cazas de pesca y camping”.

La concejala Rueda por su parte estimó que “el control de los stocks -que se propicia en el proyecto de la edila Gómez Sáenz- no le corresponde a la Municipalidad” y planteó que tal tarea es del Ministerio de Seguridad.

Los ediles y las concejalas acordaron seguir trabajando la normativa y quedó abierta la posibilidad que, tras algunas consultas, pueda invitarse a funcionarios de la Dirección General de Inspección de Industrias, Comercios y Servicios, al igual que de la Agencia Provincial de Prevención de la Violencia con Armas de Fuego.

Quedaron en tanto en estudio un proyecto de ordenanza de la concejala Gigliani que crea el Programa “Cuidemos a nuestros adultos mayores”, respecto al cual precisó que propone se le otorguen botones de pánico, y un pedido de informes de la concejala Germana Figueroa Casas, de Juntos por el Cambio, sobre el Centro integrado de Operaciones Rosario (Cior).