El reconocimiento a un pionero de la agroecología urbana se le entregó esta tarde en un acto realizado en el recinto de sesiones.
En un recinto de sesiones más que colmado esta tarde, viernes 19 de abril, se declaró Ciudadano Distinguido de la ciudad de Rosario al ingeniero agrónomo Antonio Lattuca, “un claro e indiscutible referente de la soberanía alimentaria, la ecología, la participación ciudadana y pionero de la agroecología urbana en Rosario, nuestro país y mundialmente”, a partir de una iniciativa de la edila Verónica Irizar, del bloque Socialista, a quien acompañaron sus pares de bancada Alicia Pino y Manuel Sciutto.
De Irizar
Se inició el acto con la palabra de la concejala Irizar, quien sostuvo que “es muy difícil hablar de Antonio, qué decir que no sepamos” para acotar que “siempre ha sido muy humilde” y por ello no le gustan los homenajes.
Más adelante expresó la edila del bloque Socialista que “la ciudad te debía este homenaje por todo lo que le diste. Para decirte gracias por tanto”.
Mencionó cuando en los inicios de la democracia se planteaba “cómo hacer agricultura urbana. Han pasado 40 años” y recordó la tarea en el marco de las intendencias de Hermes Binner, Miguel Lifschitz y Mónica Fein. Para marcar igualmente los lugares, costado de rutas, de la avenida de Circunvalación, ribera de los arroyos, para mencionar la energía “que transmitía un hacedor”.
Consignó la edila Irizar que en algún momento “un huertero le dijo que no nos dieron pescado, nos dieron una caña y nos enseñaron a pescar”.
Afirmó que “los huerteros todos aman a Antonio”.
También sostuvo que “estamos de vuelta en la batalla cultural” para resaltar la importancia de la agricultura urbana, la agroecología.
Hizo referencia a los 7 parques huertas y a las 700 huertas que suman más de 50 hectáreas. De igual modo recordó los premios internacionales que recibió y resaltó la “política pública de tierras de nadie a tierras de muchos”, para indicar que “hoy sostiene una huerta arriba del ‘Sunderland’”.
“Encabezó y ganó la batalla” aseveró la concejala Irizar, quien también destacó la “pasión, rigurosidad y compromiso” que hicieron que en el tema “Rosario fuera pionera en el país”.
De Sonia Tessa
La Periodista Distinguida Sonia Tessa, consignó como “un honor un poco inmerecido” la posibilidad de exponer en el acto, para mencionar que “todos los martes –en su programa de radio en el que participa Lattuca-, hay algo que se aprende” . Hizo referencia al tema de Silvio Rodríguez “Reparador de sueños”, aunque dijo que la cortina de la intervención de Lattuca es un tema de Atahualpa Yupanqui.
Dijo que en cada programa lleva un plantín, “en un estudio de radio que no hay luz natural lo llena de vida” para afirmar que “donde va transforma. Habla de lo colectivo, de hacer, con las manos, con la tierra” y ejemplificó “cuenta cómo hacer para tener una planta de lechuga en el balcón”.
“Vaya si con su práctica lo ha logrado”, reafirmó, para expresar el sueño de Lattuca de “parques huertas en la provincia. Se pueden hacer con acción colectiva. Se puede hacer más allá de las circunstancias”.
También consignó que le “daba optimismo. No dejarse abatir nunca”.
Por último hizo referencia al “registro escrito de esa experiencia, su libro”, aludió a George Orwell y un rosal que había plantado y al relacionarlo con Lattuca afirmó: “Los rosales de Antonio florecerán por mucho tiempo más”.
Entrega del reconocimiento y agradecimiento
La concejala Irizar, su par de bancada del bloque Socialista, Alicia Pino; Norma López, de la bancada Justicialista, y Mariano Roca, de Arriba Rosario, le entregaron a Lattuca la copia del decreto por el que se lo designa Ciudadano Distinguido de Rosario y el diploma enmarcado, mientras quienes colmaban el recinto aplaudían de pie.
En su agradecimiento el ingeniero agrónomo Lattuca enumeró a cada uno de los que colaboraron con él en las distintas etapas de su actividad.
Agradeció a los ediles por el reconocimiento, “a todos los que desde los años ’90 colaboraron con nuestra propuesta medio rara”.
También evocó a “los compañeros de lucha de los ’70, hoy desaparecidos”, para marcar luego a los primeros que estuvieron en el tema agricultura urbana, “ a los huerteros de la agricultura urbana, que aunque tiene 37 años aún es una semilla”.
Mencionó que en esas etapas iniciales se planteaba “producir alimentos, mitigar el hambre y hacer que desocupados trabajen”.
Enfatizó, en otro tramo de sus palabras, en “volver a enamorar a los jóvenes en la agricultura” para recordar que en una época “en Europa cultivaban la tierra los sacerdotes, y acá los chamanes, hoy es el trabajo más bajo en la escala social”.
También recordó que un encuentro, alguien que había llegado desde Chile le dijo “acá la tierra está sola” para indicar que “el 97 por ciento de la población vive en ciudades y pueblos”.
Hizo un “llamado para que el trabajo de la tierra sea central”.
Reiteró el homenaje a “huerteros y huerteras” a la primera dulcera, a quien por primera vez realizó cosmética natural. También hizo referencia a las ferias en las que los mismos huerteros venden su producción; al banco de semillas, a los padrinos y madrinas de semillas y a la agenda huertera.
Por otra parte indicó que con su archivo en el Museo de la Ciudad se trabaja “en el archivo vivo de la agricultura urbana” y también mencionó el libro sobre toda la tarea realizada.
En los tramos finales mencionó a muchos de los presentes, compañeros de lucha, huerteros, al padre Daniel Siñeris, a Damián Verzeñassi, director del Instituto de Salud Socioambiental de la Universidad Nacional de Rosario, y a Laura Bracalenti, del Centro de Estudios del Ambiente Humano.
Dijo por último “cada uno puso su granito de arena” y que “la agricultura nos tiene que convocar para seguir ayudando”.
Asistentes
Entre otros participaron del acto junto a las concejalas Irizar, Pino y López y el edil Roca; la presidenta de la Cámara de Diputados de la provincia, Clara García; la secretaria de Igualdad, Género y Derechos Humanos municipal, Mónica Ferrero; el titular del bloque de diputados nacionales de Unión por la Patria, Germán Martínez y la subsecretaria de Economía Social de la Municipalidad, Vanesa Di Bene.
También concurrieron el ex diputado nacional y ex vicerrector de la Universidad Nacional de Rosario, Eduardo Seminara; la ex diputada nacional Alicia Ciciliani; la ex diputada provincial Alicia Gutiérrez, y los ex ediles Fernando Rosúa y Alberto Cortés.
Su trayectoria
El ingeniero agrónomo Antonio Lattuca fue coordinador del Programa de Agricultura Urbana de la Municipalidad de Rosario y es uno de los “precursores de la agricultura ecológica en nuestro país, cuando a comienzos de la década del ’80 la agroecología era casi desconocida en la Argentina”, por lo que se considera un pionero y referente del tema, tanto en el país como en el mundo.
Trabajó junto a los vecinos y vecinas en la recuperación de tierras consideradas inservibles, y de tal manera creó centenares de huertas en toda la ciudad.
En el año 2005 el Programa de Agricultura Urbana (PAU) recibió el Premio Internacional Dubai de las Naciones Unidas, “como una de las diez mejores prácticas del mundo en mejorar las condiciones de vida y la porbreza”.
En tanto en el marco del certamen internacional organizado por el Centro Ross del World Resources Institute para Ciudades Sostenibles, edición 2020-2021, Rosario fue nuevamente premiada por aumentar la resiliencia contra el cambio climático y mejorar las desigualdades, a través del proyecto “Producción Sostenible de Alimentos para una Rosario Resiliente”.
Se postularon al certamen 262 proyectos de ciudades de 54 países para mostrar cómo se puede abordar de manera conjunta el cambio climático y la desigualdad.
El ingeniero agrónomo Lattuca creó el Centro Agroecológico Biodinámico de Rosario, con el objetivo de brindar semillas, capacitaciones y poder mostrar todo lo realizado en la ciudad.
Descendiente de un abuelo huertero, desde joven se interesó en la agronomía como herramienta para el cambio social y en tal sentido crea la primera huerta ecológica de la ciudad en el asentamiento El Mangrullo.
Ya en la década del ’90 junto a la Municipalidad y el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) su iniciativa de origen voluntario se transforma en política pública a través del Programa Pro Huerta. Rosario se transformó así en la primera ciudad del país en trabajar con el Programa y se pusieron en marcha huertas familiares y escolares en diferentes asentamientos.
Con la crisis del 2001, con el hambre y el desempleo, en la ciudad se llega a 700 huertas.
También Lattuca tuvo un rol clave en la constitución de los parques huerta de Rosario, aunando experiencias implementadas en Amsterdam, Países Bajos, con potenciales tierras no construibles de la ciudad, tales como costados de rutas, de vías férreas o de los arroyos. Suman al presente 7 parques huertas agroecológicos, con 37 hectáreas y a ello se suman 10 hectáreas de huertas en casas particulares. También en la zona periurbana muchos quinteros optaron por trabajar en el marco de la actividad agroecológica. Incentivó también las ferias ecológicas, donde los huerteros locales venden lo que cultivan.
Fue el creador y coordinador de la comisión de Agroecología, Agricultura Orgánica, Biodinámica y Permacultura del Colegio de Ingenieros Agrónomos de la Provincia de Santa Fe y al presente es vicepresidente de la Asociación para la Agricultura Biodinámica de Argentina.